
La carencia de un sentido vital, la tristeza, el aislamiento, aumentarían la edad biológica. Un entorno social favorecedor haría más saludable el envejecimiento. Lo contrario sucedería frente a la adversidad del ambiente. La salud mental y los aspectos psicosociales (muchas veces dejados de lado) son indicadores muy importantes de salud general. Podríamos señalar entonces la necesidad imperiosa de prevenir el envejecimiento psicológico. Contar con proyectos, mantenerse activo y productivo, tener amigos, ser solidarios, brindar afecto, conversar, compartir y transmitir experiencia a los demás, redundarían en mayor bienestar y calidad de vida. La promoción y prevención de la salud mental debería ser prioritaria y transformadora, y además multisectorial e interdisciplinaria.
Qué interesante! Este punto de vista renueva perspectivas! Gracias!!!